- Sobre unos aparentes restos o vestigios se posa una policromía generadora de unos artificios matéricos que ponen de manifiesto los signos de una civilización empedernidamente mordaz que disimula sus propias fechorías industriales o medioambientales.
- Pero además de ello, el norteamericano nacido en Alemania RUBY se ha empeñado en vestir el símbolo en sus obras, decorarlo, remendarlo, con el fin de que la simulación sea más contundente visualmente, se apropie de un espacio que considera que le corresponde y lo amplíe hasta convertirlo en un arma arrojadiza.
- Estamos ante otra de las facetas del arte contemporáneo que tratan de ilustrarnos subrepticiamente aunque con descaro de fenómenos que contemplamos en el exterior y que se nos pasan desapercibidos hasta que una configuración plástica, a través de su adaptación lingüística, no los ofrecen como significados de una degradación permanente.
El hombre con dos caras que jamás era él mismo.
El hombre que quería estar solo y no pudo
porque ya no quedaba sitio en la soledad.
(Benjamín Prado)