- ¿Qué ofrece este Olimpo visual que nos propone el cubano YAMIR? En principio un homenaje a ese clasicismo heleno de la pintura, esa perfección de cuerpo atlético y guerrero que nos deja asombrados en esta deconstrucción del siglo XXI.
- En segundo lugar, un relato de la memoria, un motivo de la carne adornada con la armadura para articular un designio que llega hasta nosotros, espectadores escépticos que nos preguntamos por el signo de una belleza que está delante de unos signos borrosos de vida y angustia.
- Hombres y mujeres, en escorzos, no fuerzan sus gestos, no les importa que se les mire aunque sea en sus situaciones más íntimas, están para eso, para dejar huella indeleble de una intemporalidad que desde el presente acumula el pasado y el futuro del arte.
No busquéis negros, su grieta
para hallar la máscara infinita.
Buscar el gran sol del centro
hechos una piña zumbadora.
(Federico García Lorca)