Vivencias Plásticas
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Lo real ha sido descompuesto y vuelto a recomponer. Y los valores espacio-temporales, densamente plantados, serán una evidencia para la persecución del dolor, la humillación, la soledad, la vejez, la tristeza y la fealdad.
Estamos atados y nos hundimos en la visión de cada imagen, cada detalle es un recuerdo, una experiencia, la férrea desnudez de una presencia compleja abocada a la muerte.
Si este virtuosismo plástico nos da un hecho cierto es porque el tiempo de la memoria no ha concluido. Y tampoco el de unas sensaciones ópticas fijas en la verdad de la carne y en la impotencia con que se va consumiendo.
Para este artista madrileño, GOLUCHO, no hay nada tan sublime como los cuerpos que confiesan, son sabidurías ya agotadas y su vida se les escapa a lo largo de espacios corroídos y anónimos. Habrá miles, millones, pero para él son unos pocos, concretos y…
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