- Norteamérica no puede desligarse actualmente de las raíces de su realismo. Prosigue y seguramente proseguirá extrayendo de él todo el imaginario correspondiente a su sociedad, a su vida, a su idiosincrasia, tratando de revelarlo desde diferentes perspectivas.
- BARTLETT no rompe con el toque académico y prototípico dentro de ese contexto, simplemente continúa la senda de sus predecesores pero imprimiendo un sello personal a sus pinturas.
- Y también incorporando aspectos fantásticos y dramáticos que implican una ruptura con unas escenas que aparecen como rutinarias, de total normalidad, y, sin embargo, después comprobamos que están preñadas de malos augurios o de violencia y soledad.
Andaban en la angustia de aquel silencio total en que van a verterse los silencios de cada uno, de cada uno de todos los que callan.
(María Zambrano)