- Ante estas obras, ¿podríamos decir, como el portugués Pessoa, que así es el mundo, basurero de fuerzas instintivas, que aún brillan al sol con tonos rasgados de oro claro y oscuro».
- No se me ocurre mejor definición para estas masas impregnadas con la energía densamente pigmentada de unos trazos que se enmarañan y entrecruzan. Y además, como señala Arnold Gehlen y como rasgo sobresaliente, la fantasía creadora del artista se ha convertido en una dimensión que depende, además de su subjetividad, de otros factores determinantes: la altura que alcanza su reflexión y la índole de su formación.
- El belga nacido en el Congo, VAN MULLEM, reúne ambos elementos en su producción, de tal manera que sus excelentes cualidades formales alcanzan la máxima exaltación de su contenido representativo, tan viscoso, gelatinoso y espeso, que absorben lo más decrépito de las entrañas humanas.
La violencia, sea cual fuere, siempre ha sido para mí una forma deshilachada de estupidez humana.
(Fernando Pessoa)