- Si somos lo que vemos, en mis obras, según el sueco, LENNARTSSON, representamos lo que somos, donde vivimos, las casas y el coche que poseemos, el sol que nos da luz y las flores que piden limosna.
- No son apuntes de escuela ni derivas primitivistas, ni tampoco la suma de ambos, son creaciones que bailan entre lo grotesco y la falta de cordura ontológica, discursos belicosos de dientes amenazadores.
- Su sencillez tiene como reverso un mensaje de humor emponzoñado, una libertad de movimiento, de tendencia y una cosmovisión apegada al graffiti, a la impronta de calle o al suburbano. Y su manifestación de encuadre siempre tiene la misma base.
Dejadme, sí, dejadme.
El corazón ansía,
ansía bajo tierra perecer como luna,
como la seca luna que se clava en el suelo:
un poniente durísimo que de un golpe se incrusta.
(Vicente Aleixandre)