
- En la obra del francés BLAIMONT la observación atenta encamina su inspiración plástica. Porque en esa observación se contiene una realidad que su virtuoso concepto del dibujo plasma desde una dimensión inventada.

- Los retratos de suave cromatismo de sus personajes vulgares y corrientes es su ideario de la vida, en virtud de la cual deberíamos contemplarnos como él nos propone.

- Sin olvidarnos de la dosis de humor que deposita en el soporte, su empresa consiste en ejecutar las antinomias del cuento del yo que diariamente nos narramos, la distorsión de un sino que nos persigue desde nuestro nacimiento.

- Llena de agua la parte blanda de mi boca
- se entierra en la tierra,
- fingiendo con los labios no estar loca.
(Tomás Martínez)