Un breve paseo por obras y artistas que infunden otra forma de mirar. Es una aproximación cuyo deseo es provocar otras emociones más íntimas y cercanas si cabe. Es una forma de mirar, otro modo de ver, un ardid para engañar, un truco para esperar, otra historia para seguir, un cuento de no acabar. Y de seguir sin perder de vista lo de más atrás.
El brasileño SEGALL era un artista viajero de ida a Brasil y vuelta a Alemania y así sucesivamente. Sus registros pasaba de un expresionismo anguloso y terrible a un realismo inhóspito.
Y su pintura es fiel reflejo de aquellas décadas de penuria y plomo, con una fuerte intensidad y creatividad para procesar la simbología de una humanidad aterida.
Su convicción la depositó como si una fuerza plástica que procedía del exterior lo invadiese y comprometiese a la realización de una amplia panoplia de estilos y significantes que hablaban por sí mismos.
Reblogueó esto en Vivencias Plásticas.
Me gustaMe gusta