
- Hay un yo que vuela y un yo que se posa, siendo la obra de arte el estado de conciencia de ese creador en el momento de la detención.

- Pero el asturiano FALCÓN siempre estaba volando y cuando se posaba era para definir la singladura de una plástica que a continuación emprendía de nuevo el vuelo.

- Así es como se gestó una obra inclasificable e inusitada, que al igual que Matisse buscaba ante todo la expresión, pues así aunaba su modo de sentir la vida y su modo de significarla y exteriorizarla.

- Toda revelación es un robo al futuro.
(Roa Bastos)