Un breve paseo por obras y artistas que infunden otra forma de mirar. Es una aproximación cuyo deseo es provocar otras emociones más íntimas y cercanas si cabe. Es una forma de mirar, otro modo de ver, un ardid para engañar, un truco para esperar, otra historia para seguir, un cuento de no acabar. Y de seguir sin perder de vista lo de más atrás.
La abstracción del americano BAKER IV lo quiere absorber todo, integrarlo dentro de un cosmos infinito y turbulento en el que las oleadas cromáticas revueltas y abigarradas reinan y bailan como damas enjoyadas.
Su técnica y recursos son lo suficientemente sólidos como para levantar paisajes, cielos y ecosistemas tan dinámicos y destructores como enaltecedores de una totalidad engullidora.