Un breve paseo por obras y artistas que infunden otra forma de mirar. Es una aproximación cuyo deseo es provocar otras emociones más íntimas y cercanas si cabe. Es una forma de mirar, otro modo de ver, un ardid para engañar, un truco para esperar, otra historia para seguir, un cuento de no acabar. Y de seguir sin perder de vista lo de más atrás.
FANK MICHAEL ZEIDLER (1952) / LA PLENITUD DEL DESTELLO VIVE EN LA MIRADA
¡Qué enormemente difícil es que la idea intuitiva, la revelación y la inspiración se confabulen en la plasmación y ejecución de esa obra que rescata al artista de su propia alucinación!
¿Cuál es la experiencia, el talento, la vivacidad y la sutileza del alemán ZEIDLER para armar toda una ficción en torno a la superficie vestida de color, texturas, arrugas y manchas?
Su maestría y praxis proyecta un lirismo, espontaneidad y sensación únicas y empeñadas en suministrar al destino plástico una existencia vital, orgánica y enérgica.