
- Ya no hay límites que no se sobrepasen, ya no hay posibilidades que sean imposibles, el relato plástico ha de proseguir con o frente a la potencia del absurdo, tomando conciencia de que no hay similitudes que valgan.

- Desde esas premisas, la obra del cubano FIGUEROA-BELTRÁN se decanta por una representación que invita a buscar su propio signo en nuestro exterior, en lo que no sabemos asociar ni involucrar en una creación que nos transmite espacios, seres y tiempos.

- A través de sus trabajos vemos y contemplamos unos desarrollos pictóricos de organización consensuada con un pensamiento absorto en lo que ya es un modo de crear entre lo verosímil y lo inverosímil, entre lo real y lo irreal.

- Posiblemente yo
- mucho antes de aquel día
- balanceándose mi sombra en un puente,
- la abandone sobre el asfalto
- en un amanecer cualquiera.
- (Nazin Hikmet)